A pocas cuadras del centro de Luque, la antigua casona que habitó Julio Correa se convirtió en un museo. En ese escenario histórico, el poeta y autor teatral es recordado a través de sus pertenencias: pinturas, diplomas, objetos de uso cotidiano y elementos de actuaciones.
Julio Correa Myzkowzky nació en Asunción el 30 de agosto de 1890. Era uno de los personajes del teatro popular paraguayo más querido por el público. Tras su muerte en 1953, la casona que habitó quedó a sus herederos, hasta que finalmente fue adquirida por la Gobernación del Departamento Central y destinada a Museo Histórico. En las paredes del salón que alberga los recuerdos de Julio Correa se pueden aprecia los retratos al óleo de él y de su esposa Georgina Martínez, pintados por Wolf Bandurek. Existe otro par de retratos muy bien logrados, cuyas firmas son casi ilegibles. Una serie de diplomas y pergaminos certifican los reconocimientos otorgados al dramaturgo nacional que se destacó en la escritura de importantes obras y lucidas actuaciones teatrales.
Julio Correa fue uno de los principales realizadores del teatro en guaraní que abordó temas de la guerra del Chaco, con la inclusión de personajes campesinos en papeles significativos, Serían veinte sus piezas teatrales relativas al conflicto bélico que sostuvieron Paraguay y Bolivia entre 1932 y 1935. Las más conocidas son: Guerra aja, Sandía yvyvuy, Pleito rire y Terehojevy fréntepe.
En un rincón del salón museo está un antiguo telón de fondo que permite recordar los tiempos de auge del teatro popular. Hay también un mortero de madera torneada que se utilizaba en casa de los Correa para la preparación de los alimentos diarios y servía, en ocasiones, como parte de la escenografía. El acervo expuesto incluye bastones, rifles, lámparas, radio receptores y un sillón, tipo reposera.
Guardada en su nicho, una imagen tallada de la Virgen María que perteneció a doña Amalia Myzkowsky, la madre de Julio Correa, revela como anécdota que fue robada durante la revolución de 1947 y recuperada años después en el Centro de Luque, por doña Georgina Martínez de Correa.
Una vitrina iluminada permite observar medallas y la condecoración de la Orden Nacional al Mérito que Julio Correa recibió del presidente Federico Chávez, en los años 50.
Otro exhibidor de mayor tamaño contiene un rifle, sellos, pipas, panfletos, escritos a máquina y recibos de su profesión de rematador público. Además, programas de funciones, asó como páginas originales de la obra Toribio.
Amado y respetado por el público, Julio Correa gozó del cariño popular hasta su muerte ocurrida en Luque, el 14 de julio de 1953.
Con el nombre de Centro Cultural Departamental Casona Julio Correa, la Gobernación de Central administra el edificio que habitó el célebre personaje. En la vieja edificación de tres salas, pisos de ladrillos, corredor yeré y sótanos, funciona también un departamento cultural y se dan clases de guitarra, arpa, órgano y se practica artes marciales (Tae-kwon do).
El Museo Julio Correa se ubica en las calles Antequera y Julio Correa de la ciudad de Luque. Recibe la visita del público de lunes a viernes de 08:00 a 12:00, por las mañas y por las tardes, de 14:00 a 18:00. Los sábados, de 09:00 a 12:00.
Fuente: Contacto Turístico - Agosto 2010